La ordenanza reglamenta y prohíbe utilizar espacios públicos para realizar ventas, por la cual se les da un plazo de ley para que puedan desafectar el lugar, y así evitar mayores inconvenientes, según informaron desde la Municipalidad de Luque.
Ante la inacción o complicidad de los fiscalizadores de Inspectoría General de la Municipalidad de Luque, los comerciantes se apropiaron de bocacalles, calzadas y veredas del microcentro de la ciudad. El tránsito se volvió peligroso y caótico, teniendo en cuenta que los vendedores literalmente se adueñaron de los espacios públicos.
La Municipalidad hace la vista gorda ante al atropello de los comerciantes, quienes además de controlar los espacios públicos, también se adueñan de los estacionamientos, utilizando sillas, cajas, carretillas y hasta cajas de cerveza para «reservar» los lugares.
No solo Inspectoría fracasa en el control y ordenamiento de los vendedores, sino también son responsables los agentes de la Policía Municipal de Tránsito, quienes permiten todo tipo de atropello a la ciudadanía que acude al Mercado y negocios aledaños para realizar sus compras.
Los clientes, además de no contar con un lugar para estacionar, deben lidiar con los malhumorados vendedores informales, quienes se creen dueños de los espacios públicos que ocupan, principalmente sobre las calles Capitán Bado, Moisés Bertoni, Javier Bogarín y Balderrama.
Los jueces del Juzgado de Faltas de la Municipalidad de Luque deberían tomar cartas en el espinoso caso para despejar las calles y así evitar accidentes, principalmente en las bocacalles ocupadas por los vendedores y dificultan la visibilidad a los conductores.
Los camiones que proveen mercaderías en los locales comerciales también estacionan en doble fila sobre las referidas calles adyacentes al Mercado.
El operativo que contó con apoyo de agentes de la Comisaría 3ª Central se realizó en el semáforo instalado en las calles Rosario y Tte. Rojas Silva, del microcentro de la ciudad.
Los directores de la Codeni, Lic. Nadia Vázquez, y de Asuntos Jurídicos, Abg. Raúl Salinas, encabezaron la intervención de manera a precautelar la seguridad de los menores en situación de calle y así evitar accidentes que puedan comprometer a los conductores.
Un grupo de niños de la parcialidad Aché, varios de ellos de entre 3 a 5 años y adolescentes, se encontraba sin la supervisión de un adulto, exponiéndose al peligro en medio del caótico tránsito en el cruce semafórico de las calles Rosario y Teniente Rojas Silva.
Los menores fueron llevados hasta su comunidad en un vehículo de la Municipalidad de Luque.
El otro grupo estaba a cargo de Silvina Cabral, de la parcialidad Mbyá Guaraní. La mujer se encontraba con sus tres hijos menores sobre la calle Tte. Rojas Silva.
La mujer explicó a los intervinientes que por día llegan a recaudar unos 30 mil guaraníes.
Explicó que hace tiempo no reciben víveres de la INDI, por lo que decidió llevar a sus hijos a pedir dinero en el referido lugar, debido a que supuestamente no tiene forma de comprar alimentos.
Agregó que junto a su marido fabrican artículos artesanales, pero no tiene un lugar para ir a vender, intentó justificar.
Los directores les explicaron que está exponiendo y explotando a sus hijos menores y le “invitaron” a retirarse del lugar.
Según los directores intervinientes, existen muchas quejas de los vecinos y conductores de vehículos, principalmente por el peligro que representa la presencia de los niños en plena calle y en medio de los vehículos.
La Dirección de Codeni anunció que estará monitoreando la presencia de menores en las calles para evitar la explotación infantil, mediante intervenciones sorpresivas. La intervención fue comunicada previamente a la Dirección de Pueblos Originarios de la INDI y a la Defensoría del Pueblo, cuyos representantes brillaron por sus ausencias.