Los
víveres figuraban entre las solicitudes del grupo criminal en un mensaje dejado
en las inmediaciones del sitio donde ocurrió el secuestro del ex vicepresidente
y Adelio Mendoza, el miércoles pasado.

La
distribución de víveres debe ser por USD 2 millones a unas 40 comunidades de
Canindeyú, Concepción, San Pedro y Amambay. Dentro de la medida de extorsión
del grupo criminal, exigen que si una comunidad no acepta los víveres se
entregue a otra.

Los
familiares de Denis informaron que están en contacto con proveedores y
asociaciones de comerciantes para conformar los kits con los elementos
descriptos. Este domingo será la primera parte de la entrega a comunidades de
Arroyito.

«Estamos
cumpliendo con el pedido. El compromiso que vamos a asumir es grande y estamos
demostrando esa predisposición, así que rogamos nuevamente una prueba de vida»,
manifestó una de las hijas en conferencia de prensa este domingo en la estancia
Tranquerita.

Por
último, indicaron que la bolsa con los
medicamentos que debe tomar el ex vicepresidente no fue llevada, pese a que se
cumplió con las exigencias de dónde dejar y de liberar la zona de efectivos de
la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC).

El hombre fue recapturado en la mañana de este
miércoles en Limpio, mediante un trabajo de inteligencia que la Policía
Nacional llevó a cabo hace siete meses, informó el comisario Nimio Cardozo.

Acosta debía cumplir una condena por secuestro, robo
agravado y asociación criminal tras ser condenado en el 2004 a 14 años de
encierro. Fue remitido a Tacumbú, de donde se fugó dos años después.

El hombre está sindicado de cometer el secuestro de
toda una familia y de cobrar la suma de G. 100 millones, más 1 kilo de oro,
según el jefe policial.

Según la pesquisa, el fugado, se movilizaba por los
departamentos de Caaguazú y Alto Paraná. Además, iba y venía del Brasil,
utilizando un documento ajeno. El procedimiento fue informado al fiscal
Federico Delfino.

Los policías detenidos son el suboficial primero
José Castillo Giménez (32), de la subcomisaría 03 de Cañada San Rafal, y de su
camarada Eudelio Rubén Lezcano Brítez (31), de la comisaría 46ª de Isla Bogado.
Ambos están privados de su libertad en sede de la Comisaría 8ª de Capiatá,
teniendo en cuenta que el hecho ocurrió en la jurisdicción de Capiatá.

Los uniformados fueron detenidos en sus respectivas
comisarías, durante allanamientos encabezados por el fiscal de Capiatá, Hugo
Pérez.

La denuncia fue presentada por el comerciante y
mecánico Mario Aldo Villamayo (41), quien tiene una bodega en su casa, en
Capiatá.

La víctima relató que los policías llegaron hasta su
negocio en la noche del sábado y le exigieron dinero. La suma requerida por los
uniformados era G. 10 millones.

El denunciante dijo que al negarse a entregar el
dinero fue raptado por los policías que se encontraban a bordo de una camioneta
particular.

Los dos citados policías estaban uniformados, mientras
otros dos hombres vestidos de civil, que deben ser identificados. Es decir
actuaron cuatro policías para cometer el grave hecho punible.

La víctima agrega que también se dedica a la compra
y venta de vehículos. Unos días antes de la “visita” de los policías publicó en
las redes sociales un anunció en el que escribió que tenía “plata en mano” para
comprar vehículos, por lo que cree que este elemento pudo haber incentivado a
los agentes para chantajearlo.

Sostuvo que los dos policías y los dos civiles lo
alzaron a una camioneta Hyndai, modelo Santa Fe, lo esposaron y después le
ordenaron que les entregara el dinero que tenía. Desde el principio exigían la
suma de 10 millones de guaraníes.

Seguidamente, y ante la desesperación del
comerciante, su esposa tuvo que inventar y entregar la plata, que totalizó G. 7
millones. Si no pagaban, los policías amenazaban con plantarle drogas y
enviarlo a la cárcel, según su relato.

Los dos suboficiales fueron reconocidos plenamente
por la víctima, quien tras ser liberado recorrió casi todas las comisarías
aledañas y encontró en sus unidades a los agentes.

En la madrugada del domingo radicó la denuncia en la
Comisaría 8ª de Capiatá, y el fiscal Hugo Pérez, informado de la grave
situación, procedió a allanar las dependencias policiales para aprehender a los
dos uniformados sindicados como autores de los hechos punibles.

Un nuevo caso de supuesto
intento de secuestro de un escolar se produjo este lunes en la zona de Costa
Sosa, Luque. Sin embargo, la Policía verificó la denuncia y catalogó el hecho
como una falsa alarma.

Hace un par de
semanas padres de alumnos de instituciones educativas de la compañía Maramburé
presentaron denuncias sobre intentos de raptos.

Fueron víctimas
dos hermanitos de 6 y 8 años, y un menor de 17 años, según las denuncias
formuladas en la base de la Comisaría 3ra de Luque.

Luego se dio a
conocer otro caso que involucra a una adolescente de 13 años. La estudiante
relató que fue perseguida por extraños en pleno centro Luque, cuando aguardaba
el colectivo para trasladarse a su casa luego de salir de un colegio privado
del microcentro de la ciudad.

Nuevo caso

Este lunes
recorrió por WhatsApp un nuevo audio donde una  alertaba de un nuevo caso, pero esta vez cerca
del local militar conocido como Remonta, ubicado sobre De Las Residentas
(camino que une Luque con Areguá).

En el audio la
mujer relata que acaba de producir un secuestro, y que la víctima fue alzada en
un vehículo.

Agrega que se
trata de un escolar de la Escuela Básica De Las Residentas.

Al final comenta
que un grupo de policías llegó al lugar para investigar el hecho.

En ese sentido, el
comisario Víctor Vera, jefe de la Comisaría 3ra de Luque, explicó que se
verificó el código, pero resultó ser una falsa alarma.

Se reportó
un nuevo caso de intento de rapto en el microcento de Luque. Esta vez, una
estudiante de 13 años, denunció a través de audios que fue perseguida por
extraños, mientras esperaba colectivo para volver a su casa luego de salir del
colegio.

El intento del hecho punible habría ocurrido este martes, según cuenta en los audios que compartió con sus contactos, a través de la plataforma de mensajería WhatsApp.

La víctima
relató que los desconocidos estaban a bordo de un automóvil de color oscuro.

Los audios

Supuestamente
eran dos personas adultas. El conductor detuvo la marcha en la esquina, y el
acompañante se dirigió a la chica con sospechosas intenciones.

Allí, la
estudiante empezó a correr para alejarse del lugar, y evitar ser raptada o
secuestrada por los extraños.

El nuevo
caso se suma a los otros dos reportados entre el domingo y lunes en zonas de
Maramburé.

Dos casos en Maramburé

Según los antecedentes, en Maramburé también intentaron secuestrar a dos hermanitos de 6 y 8 años, además de un menor de 17 años.

Los
referidos hechos fueron denunciados en la tarde de este martes en la oficina de
guardia de la Comisaría 3ra de Luque. Los sucesos fueron comunicados a la
Fiscalía para iniciar la investigación.

Este último
hecho aún no se denunció ante la Policía, según se supo. Esta situación causó
sicosis en los padres, alumnos y docentes de diferentes instituciones
educativas de Luque.

Recomiendan cuidarse

En las redes
sociales y en los grupos de WhatsApp recomiendan a los alumnos a tener cuidados
y a no aceptar la invitación de extraños a subir en los vehículos.

Por su parte,
la Policía reforzó la seguridad en las inmediaciones de las instituciones
educativas para brindar seguridad a los estudiantes, explicó el Crio. Princ.
Víctor Vera, jefe de la Comisaría 3ra de Luque.

En principio
se hablaba solo de un caso que afectada a un menor de 17 años, pero luego los
padres de dos hermanos de 6 y 8 años, también se acercaron a la Comisaría 3ra
Central, a comunicar el presunto intento de rapto a la salida de una escuela en
Maramburé.   

Según las
denuncias, los hechos ocurrieron entre el domingo y el lunes, en la compañía de
Maramburé.

El jefe de
la comisaría 3ra  de Luque, el Crio.
Princ. Víctor Vera, explicó que al principio tuvieron conocimiento de un caso
de intento de secuestro de un estudiante de 17 años.

Tras iniciar
la pesquisa, se supo de otro caso similar, detalló el jefe policial.

Agregó que
ante la insistencia, finalmente los padres radicaron la denuncia recién este
martes. Ambos casos fueron comunicados inmediatamente a la Fiscalía para
avanzar con la investigación.

Según el
informe policial, el padre del menor de 17 años, en la noche del domingo pasado
ocupó a su hijo hasta un almacén cercano, y supuestamente de vuelta a su
domicilio en el asentamiento Virgen de Caacupé, fue sorprendido interceptado por
hombre, que descendió de un vehículo rojo ocupado por una pareja.

Seguidamente
el desconocido lo tomó del hombro bruscamente y le exigió tener relaciones
sexuales con la mujer a cambio de G. 150.000.

Pero el adolescente
se negó, y en ese momento pasaron por el lugar dos personas, quienes le
saludaron, y aprovechó para escapar de los extraños, explicó el comisario Vera.

Nuevo caso

Un nuevo
caso se reportó en la tarde del lunes, nuevamente en la zona de Maramburé,
específicamente en las inmediaciones de la escuela Maestro Silva.

En esta
oportunidad, resultaron víctimas dos hermanos de 6 y 8 años, quienes fueron
encarados por extraños a la salida de la escuela.

Según
comentó su madre, en el trayecto a su casa fueron alcanzados por dos hombres
adultos, quienes invitaron a los menores a ser llevados hasta su casa en un
automóvil.

Sin embargo,
los niños se negaron y ante la negativa los hombres intentaron alzarlos a la
fuerza en el habitáculo.

En ese
sentido, el comisario explicó dijo los desconocidos finalmente desistieron de
sus objetivos a raíz de que los vecinos salieron a mirar lo que estaba pasando.
Finalmente huyeron del lugar.

Audio causó sicosis en Maramburé

El jefe
policial informó que el audio de una docente que alertaba del intento de
secuestro cerca de la escuela se viralizó y causó sicosis entre los padres de
los escolares.  

En el
material la educadora aconsejó a los padres a cuidar a sus hijos ante la
presencia de violadores.

Ante el
temor generalizado, el comisario Vera ordenó redoblar la seguridad en las
cercanías de las instituciones educativas de Maramburé.