“Esta pandemia en vez de ahogarme, me enseñó a nadar”
“A
causa de la pandemia tuve que abandonar mi antiguo trabajo e hice un stop a mis
estudios por la situación difícil que estamos atravesando a nivel mundial a
causa de la pandemia”, comenzó relatando.
“Pero
como todos sabemos, en tiempos como éstos uno desarrolla otros talentos
ocultos, y yo lo descubrí. Esta pandemia
en vez de ahogarme me enseñó a nadar”, grafica.
El
joven comenzó a producir y a comercializar su producto, recibiendo el apoyo de
la ciudadanía comprando las deliciosas medialunas caseras.
“Tenemos
de dulces de leche y guayaba, nuestros productos lo hacemos al día. Hacemos entrega
a través de delivery”, dijo.
“Topo Pizzas” nació en plena cuarentena con sabor y toque casero
Para
“conquistar” a los exigentes clientes, crearon una masa esponjosa y son los
únicos en usar una salsa casera de verduras y especias, siendo estos dos los
protagonistas de sus productos.
Fueron
los primeros en ofrecer más de diez variedades de pizzas, algunos sabores
propios de la casa, además de ser los pioneros en la ciudad de Piribebuy introducir
los toppings.
También crearon las “choripizzas”: bocados de una rebanada de chorizo a elección cocinado con condimentos envuelto en masa para pizza, todo esto cubierto con salsa casera; quesos y orégano, que es todo un éxito desde su lanzamiento. (Ver en redes): https://www.instagram.com/topopizzas/ y https://www.facebook.com/topopizzas
Mensualmente
ofrecen sabores más exclusivos como
pizzas de camarones para brindar a sus clientes la facilidad de degustar
ingredientes más inusuales, además de reafirmar su compromiso con la
calidad e innovación.
“Empezamos
en abril pasado, sorteamos mil obstáculos en aquel entonces, ya que era difícil
conseguir todos los ingredientes y materiales que se necesitaban por estar un
tanto alejado de la capital y la situación de cuarentena total. Además estábamos
con presupuesto ajustado y constantemente teníamos que probar nuevas fórmulas y
así conquistar la mayor cantidad de clientes, pese a la pandemia”, explicó José
Matías Chaparro Centurión, propietario de “Topo Pizzas”.
“Nuestro
objetivo es continuar con este ambicioso proyecto después de la cuarentena;
mejorar nuestras recetas haciendo más óptimo el preparado y el uso de ingredientes,
equiparnos con una mejor infraestructura ya que la mayoría de los
electrodomésticos que usamos los traje de mi alquiler, cuando estudiaba en San
Lorenzo”, comentó el emprendedor.
Agregó:
“Invertir en marketing digital es uno de nuestros puntos flojos ahora debido al
ajustado tiempo que tengo por la carrera que sigo vía oline en la Universidad
Nacional de Asunción (UNA), y por sobre todo capacitarnos en el preparado de las
pizzas, saber cómo conseguir los mejores resultados en la elaboración.”
“Queremos
introducir varios tamaños de pizzas como la personal y familiar. La personal ya
que en tiempos de cuarentena uno está aislado de la gente y a veces una pizza
normal ya queda grande, y la familiar ya que muchos de nuestros clientes son
familias numerosas a quienes les queda corta una pizza normal.”
“Además,
queremos seguir ofreciendo nuevos sabores de pizzas con ingredientes más
exóticos, preparados distintos, dar esa oportunidad a los clientes de poder
probar algo nuevo pensando a futuro y teniendo en cuenta que Piribebuy es una
de las ciudades que más turistas recibe cada año”, puntualizó el estudiante.
El
emprendimiento nació en abril pasado con la idea inicial del emprendedor José
Matías Chaparro Centurión (23), quien junto a sus hermanos Evelyn (19), Dahiana
(18), e Iván (14), comenzaron a trabajar juntos para agregar sabor a la rutina
y aprovechar el tiempo, teniendo en cuenta que todos son estudiantes y por la
pandemia siguen sus respectivos cursos vía online.
Pizzas caseras a la parrilla conquistan paladares en plena pandemia en Luque
“Soy de hacer pizzas caseras pero solo para consumo
familiar y ahí hablamos con mi esposo y le dije que porqué no empezamos a hacer
pizzas para vender con lo poco que teníamos y con la ayuda de mi madre que nos
proveyó para completar los ingredientes y las cajas para una mejor presentación”,
comenzó diciendo Katterine Bello.
Según la emprendedora, en el primer día lograron
entregar 10 pizzas.
“Espero la ayuda de la gente. Lo hacemos con todo el amor del mundo, pensando en nuestros hijos de 4 y 5 años”, agrega la mujer.
Sostiene que por la pandemia la situación es complicada
y haría cualquier cosa para que sus chicos no pasen hambre y no les falten
nada.
Katterine explica que el delivery a partir de 2 pizzas es
gratis, mientras sí el pedido es de una sola pizza el envío cobran G. 5.000.
La pizza a la parrilla están a comercializando a G.
20.000 cada una.
Una comida rápida bastante popular es la pizza, un alimento italiano que puede ser hallado en cualquier lugar del mundo ya que actualmente existen una gran variedad de recetas y sabores. Teniendo en cuenta todos estos aspectos positivos, Katterine comenzó el negocio familiar en plena pandemia.
Los sabores son:
Pollo con catupiry, peperoni, jamón, mozzarella, súper
napolitana.
La mujer ruega hacer el pedido con anticipación al 0991-519
360, de modo a recibir sus pizzas en tiempo y forma.
La esencia del negocio está en la creatividad
Para los nostálgicos, las kombis nunca pasan de moda,
y la pareja de emprendedores, conformada por Vito Aranda y Susy Barreto, tuvieron la visión para comprar y
transformar un antiguo Kombi para el negocio familiar.
Los comerciantes realizaron una inversión de G. 30
millones para poner a punto el vehículo con todos los accesorios y ahora “echan
a rodar” el negocio gastronómico con las primeras ventas de panchos y
superpanchos gourmets. En la noche de la inauguración vendieron 250
superpanchos, comentó muy entusiasmado Vito Aranda.
El emprendimiento nació hace seis meses y la idea es
potenciar el negocio familiar que poseen con la venta de tragos, llamado Barra:
“Vito Drin”, que “ya camina solo”, según su propietario.
La Kombi, ubicada en la Avenida Suboficial Andrés
Zaracho e/ Suboficial Ignacio Vera, del barrio Villa Policial de Mora Cué, Luque,
llama la atención en la zona por su techo levantado, sus ventanas que muestran el
proceso de transformación del vehículo y la gente que se aglutina a la espera
de algún sabroso pancho con ingredientes más gourmets que los tradicionales.
Por ahora, los fines de semanas (viernes y sábados)
los dueños abren con mucho éxito su local culinario sobre ruedas, que invita a
transeúntes y a automovilistas a hacer una parada obligatoria para comer y
compartir de una manera novedosa y original.
Para Vito Aranda, lo pintoresco de este modelo de
vehículo es que está siempre vigente, y llama la atención de los clientes.
En ese sentido, comentó que es increíble la
curiosidad que genera en la gente, que viene y se saca fotos mientras aguarda
su pedido. Sobre todo los niños, se vuelven locos.
Es así que esta joven pareja invita a disfrutar de
sus especialidades, visitando su local en Mora Cué. Los precios son muy
accesibles.
Los carros de comida se volvieron populares por su
propuesta gourmet y la rapidez del servicio, ganando notoriedad en Paraguay a
partir del 2015 aproximadamente.
Esta exitosa idea nació originalmente en los Estados
Unidos con la conversión de los vehículos antiguos a food trucks (carros de
comida).
Para los interesados en contratarlos para algún
evento, pueden llamar al 0991-424039.