El
suceso se produjo sobre la ruta intermunicipal Las Residentas y Santo Rey, zona
de Costa Sosa, Luque.
La
camioneta con chapa HEX 834 circulaba con destino a Areguá, mientras el
automóvil Toyota, modelo Funcargo, aparentemente salió a la ruta desde la calle
Santo Rey, como para avanzar hacia el centro de Luque.
Por fortuna, el choque no fue violento. Solo daños materiales, dijeron algunos curiosos.
Cabe señalar que en este mismo sitio un alumno fue atropellado el año pasado, cuando se dirigía a la Escuela San Luis Gonzága. El niño de 10 años milagrosamente se salvó de morir.
Choque entre motos deja un muerto en ruta Luque – Areguá
El otro motociclista que causó el accidente, Andrés
Javier Benítez, de 39 años, dio positivo a la prueba de alcotest, arrojando como
resultado 0,560 MG/L, según el informe oficial de la Comisaría 3ª de Luque.
El accidente fatal ocurrió en la madrugada de este
viernes, alrededor de las 02:45, en la ruta Las Residentas y Los Inmigrantes,
de la compañía Costa Sosa, de Luque.
Según el informe policial, el motociclista Franco
Prieto circulaba por Las Residentas e iba de Luque hacia Areguá, y al llegar
con la intercepción a Los Inmigrante, rozó contra la motocicleta guiada por
Andrés Domínguez.
A raíz del impacto, el motociclista perdió la dirección
de su motocicleta de alta gama, yendo a caer en la banquina, en donde se
produjo su deceso. Los bomberos intentaron reanimarlo pero fue imposible,
explicó el comisario Feliciano Ferreira, subjefe de la Comisaría 3ª de Luque.
La motocicleta
Harley Davidson, con chapa 171 AAAD, quedó a unos 80 metros del lugar del
choque, denotando que el conductor le imprimía una alta velocidad, rumbo a su
casa en el barrio San Blas, de Ypacaraí.
El conductor de la otra motocicleta, Andrés Javier
Domínguez, de 39 años, domiciliado sobre la calle Santo Rey, de Costa Sosa,
salió ileso, pero se comprobó que conducía en estado de ebriedad.
Sin embargo, su acompañante de nombre Alcides Ramón
Benítez Brusich, de 29 años, sufrió lesiones y fue llevado hasta el Hospital de
Luque. Su estado no reviste gravedad, informaron.
Los bomberos de la Vigésima Primera Compañía de la
ciudad de Areguá, y Bomberos de Luque,
acudieron hasta el lugar para auxiliar a las víctimas. Por media hora
intentaron reanimarlo al motociclista Franco Prieto.
El asistente fiscal Francisco Barreto y el médico forense
Hugo Leguizamón, del Ministerio Público
de Luque, fueron convocados al lugar del accidente fatal.
El forense diagnosticó como causa de la muerte del
motociclista: “Politraumatismo de cráneo encefálico severo”. El cuerpo fue
entregado a los familiares.
Por su parte, la fiscal Sonia Pereira, dispuso la
detención del motociclista ebrio, Andrés Domínguez.
Usuarios sin agua en 3 de Mayo y Costa Sosa
Sin embargo, desde la empresa dijeron que uno de los
motores de bombeo tuvo una falla, y tuvo que ser reemplazado por los técnicos
de la empresa.
Indicaron que a
partir del mediodía de este jueves se normalizaría el servicio de agua en ambas
compañías luqueñas.
La aguatería “El Cencerro” cobra a cada usuario la suma de G. 35.850, en forma mensual. Sin embargo, la prestación no condice con el pésimo servicio que ofrece esta empresa en las comunidades luqueñas, precisó uno de los denunciantes Agustín Rotela.
Según las quejas, cualquier situación que se presenta,
los técnicos de la firma tienen que venir de su sede central en Villa Elisa,
por lo que tardan demasiado tiempo para solucionar los inconvenientes surgidos
con la provisión de agua potable.
Los vecinos anunciaron que se van a asesorar para presentar una denuncia en la Oficina de Defensa del Consumidor de la Municipalidad de Luque para tomar cartas en el asunto, debido a la penosa situación que deben atravesar los usuarios en época de calor intenso y sin agua, pero pagando un alto precio por un servicio de mala calidad, según dijeron.
Ante la falta de agua, las quejas no se hicieron esperar en las redes sociales contra «El Cencerro».
Fue a visitar a su abuelo y le dejaron a pie
Resultó víctima Dahian Atilio Santa Cruz Castro (21),
empleado, domiciliado en Maka’í, Luque.
El robo ocurrió en la vía pública en Coronal Martínez
casi Santo Rey, Luque.
De acuerdo de la denuncia formulada ante la Policía, la
motocicleta robada es de la marca Star, de 125 cc, año 2012, con chapa BJV 722,
de color bordó.
El joven explicó que fue a visitar a su abuelo en la
noche del lunes, alrededor de las 22:00, dejando su biciclo en la vereda de la
casa de su abuelo.
Luego, a las 23.40, salió a mirar y ya no encontró su motocicleta en el lugar que había dejado una hora antes, por lo que la víctima radicó la denuncia en sede policial.
Choque, persecución y violenta agresión en Costa Sosa
El accidente ocurrió en la noche de este sábado en Santo
Rey y Coronel Martínez, zona de la compañía Costa Sosa, según el informe
policial.
El conductor que protagonizó el accidente fue identificado como José Benítez Urán (37), albañil, domiciliado en las calles Alboradas c/ Santo Rey, de Costa Sosa, Luque, quien arrojó resultado positivo a la prueba del alcotest de 1, 15 mg/l.
Benítez Urán se encontraba al mando del automóvil Toyota, modelo Funcargo, color rojo, año 2002, con matrícula HGO 594, que quedó con importantes daños materiales a raíz del choque. El conductor será procesado por exposición al peligro en el tránsito terrestre.
Según la Policía, el constructor atropelló a un motocarro conducido por Víctor Hugo Franco
(44), empleado, domiciliado en Alboradas c/ Santo Rey de Costa Sosa. Dicho
vehículo de carga es de la marca Kenton, modelo Transporter, año 2019, con
matricula 127 HCE.
Franco relató que circulaba por Santo Rey y cuando
aminoró la marcha de su motocarro para cruzar una lomada, fue impactado por el
automóvil Funcargo.
A raíz del violento impacto, el motocarro fue lanzado
por un árbol al costado del camino, y mientras su conductor quedó con diversas
lesiones.
Huyó
Sin embargo, el conductor del automóvil no paró la marcha y en la huida rozó por otro
vehículo que circulaba por la zona al mando de Luis Gilberto Marecos Candia (18),
estudiante, domiciliado en las calles Cnel. Martínez c/ Santo Rey, Costa Sosa,
de Luque. El rodado es una camioneta Toyota, modelo Hilux, color celeste, año
1990, con matrícula EAC 996.
El joven persiguió al conductor que se dio a la fuga, y
alertó a su padre Gilberto Marecos Cabrera (47), quien se encontraba cerca del
lugar, a bordo de su motocicleta salió frente al conductor de la Funcargo.
El albañil detuvo la marcha de su vehículo, y allí
salieron todos sus familiares, entre ellos algunos policías de civil, quienes
reaccionaron de manera violenta contra padre e hijo, según relató Gilberto
Marecos.
Según Marecos, tanto él como su hijo no sabían que estaban frente a la casa del albañil (en Alboradas casi Las Mercedes en la zona de 3 de Mayo). Allí intentaron reclamar para exigir al conductor que se haga responsable del choque contra el conductor del motocarro y del daño causado a su camioneta, pero fueron atacados violentamente por una turba de al menos 7 personas entre ellos policías.
Brutal
agresión
Explicó que a él y a su hijo les estrangularon y le
propinaron golpes de puño y patadas en forma brutal. El joven cuando intentó
subir a la camioneta, uno de los hombres le cerró la puerta por su mano y le
golpearon en la cabeza, dejándolo con herida en el cuero cabelludo.
Luego escaparon a pie del lugar, debido a que corrían
riegos de ser asesinados, según explicó el afectado.
La moto y la camioneta de padre e hijo abandonaron en
el lugar de la agresión, fueron rescatadas por los policías, quienes acudieron
al lugar para realizar la intervención. En la camioneta hallaron un arma de
fuego, informó la Policía.
Según Gilberto Marecos, el hecho ocurrió en la noche
del sábado entre las 20:30 y 21:00, aproximadamente.
Sin embargo, los
agentes de guardia de la Comisaría 3ª de Luque se habrían negados a tomar la
denuncia, y en el informe hicieron figurar que tanto el accidente como la
agresión ocurrieron en horas de la madrugada. El denunciante sospecha de la
complicidad policial, puesto que desde un principio se negaron a recibir la
denuncia.
Los cuatro involucrados en ambos sucesos fueron
sometidos a la prueba del alcotest, y solo el albañil que causó el choque
contra el motocarro fue quien arrojó positivo con un alto porcentaje.
El caso fue informado al fiscal Francisco Torres, quien
dispuso la detención preventiva del conductor ebrio, y la incautación del arma
de fuego encontrado en la camioneta del joven Luis Gilberto Marecos Candia.
El arma de fuego hallado por los policías intervinientes
es un revólver, de la marca Rossi, calibre 38 especial, serie N° AA279715, con
culata de color negro, en los alveolos dos cartuchos, uno percutido y otro vivo.
Ahora, el fuego ataca la Biblia en la casa «embrujada»
La familia no volverá a dormir ahí hasta que se solucione. Están rezando un novenario, vecinos y parientes les ayudan. Pasó casi una semana del extraño incendio que les obligó a sacar y tirar casi todas las cosas de la casa, ahora están durmiendo bajo un tinglado que les cedió un vecino.
Hablamos de la numerosa familia luqueña en cuya casa comenzaron a quemarse de a poco las cosas desde hace un tiempo y al parecer sin una explicación lógica. La vivienda está situada en Comuneros y Santo Rey, en la zona de Costa Sosa, Luque.
El
martes fue el último episodio que les dio piel de gallina a todos. De la nada
comenzó a prenderse la Biblia que se colocó en el altar, donde una señora hace
la “liberación” cada tarde. Una página fue la que se consumió por completo,
mientras que los bordes de todo el libro sagrado se ennegrecieron.
“Mis dos sobrinos lo que vieron cuando se prendió, ahora
ellos se fueron porque están con mucho miedo”, contó la dueña de casa Silvina
Alfonso.
En la vivienda viven cinco familias por separado (todos
parientes), una de ellas ya se mudó por temor. El resto permanece en el predio
de enfrente para que no se entre a la casa de noche.
Los integrantes creen que todo es por culpa de alguna fuerza maligna y están haciendo de todo para “limpiar” el lugar.
No
van al cole
Los niños de la casa dejaron de irse a la escuela desde
esta semana, refirió Silvina. Se quedan en casa ajena para tener algo de
comodidad.
Su sobrina Liz Alfonso, por su parte, contó que sus
cuatro hermanitos dejaron de irse al cole porque los compañeritos les hinchaban
mucho con lo de “la casa embrujada”.
En la institución le dijeron a Silvina que no se preocupen,
que no perderán los exámenes.
Les
ayudan
Los miembros de la capilla San Miguel les suelen llevar
el almuerzo y algunos familiares les acercan el desayuno. Funcionarios de la
Municipalidad de Luque les llevaron un poco de víveres y ropa hace unos días,
pero la familia pidió chapas para armar un techo provisorio, dijo Silvina.
Para ayudar a esta familia que debe empezar de cero,
pueden comunicarse al (0982) 559 549 o al (0986) 435 485.
Sin
certezas
El capitán Willian Argüello, bombero voluntario de
Luque, dijo que la compañía fue dos veces el sábado, después ya no les
llamaron. Él en su informe resaltó que había irregularidades en las
instalaciones eléctricas en las cinco casitas, con conexiones clandestinas
entre una y otra.
Dijo que si bien existen los incendios espontáneos, no
había algo que indique que eso ocurrió en la casa, pero tampoco puede afirmar
que alguien los provocó. Llegó a ver solo los rastros de objetos quemados, y
que “era muy raro”, mencionó.
Muy
raro
El sábado la familia perdió un montón de cosas, como
una cama, el ropero, el carrito de un bebé, el acondicionador de aire. Pero
también se quemaron otras cosas que llamaron la atención, una bolsita de
plástico colgada de un alambre, un trapo colgado de una puerta, un enchufe
aunque se había cortado la electricidad de la casa, y hasta una bolsa con
remedios yuyos que estaba sobre una cama. Lo último es lo de la Biblia.