Un automovilista alcoholizado
produjo un accidente con dos muertos al impactar contra una motocicleta. El
responsable del hecho resultó ser un colombiano, informó la Policía.

El suceso vehicular ocurrió en la mañana de este miércoles en la Acceso Sur y Pratt Gill, de la ciudad de Ñemby.

Los fallecidos
fueron identificados como Aníbal Espínola Barboza (51), y Wilfrido Vera (51), ocupantes
de una motocicleta Gio, con Chapa KAF 146, que quedó destrozada tras el
violento impacto.

El otro vehículo
involucrado es automóvil Toyota, modelo Allex, chapa KAF 146, guiado por Yerson
Herrera Rodríguez, colombiano 23 años de edad, con pasaporte Nro AV203600, domiciliado
en Jacinto Herrera y 1ro de Mayo del barrio Pa i Ñu, de Ñemby.

El extranjero salió
ileso y fue cometido a la prueba de alcotest en la sede de la Caminera en San
Lorenzo, arrojando positivo 0.934 miligramos de alcohol en la sangre.

Dos
delincuentes motorizados asaltaron una farmacia y se llevaron la recaudación
del día. El asalto armado ocurrió este lunes en la ciudad Lambaré, informó la
Policía.

La farmacia
asaltada corresponde a la cadena “Farmatitu”, situada sobre las calles
Bonifacio Ovando y Bogotá, de Lambaré.

Según el
informe policial, los motochorros irrumpieron armados con revólveres en la
empresa. Afortunadamente, nadie resultó herido durante el atraco. Los empleados
fueron inmovilizados y despojados de sus pertenencias.

Los policías
verificaron las cámaras de circuitos cerrados para intentar identificar a los violentos
asaltantes.

Recuperan auto robado

El joven
Matías Patiño Cabrera (22), fue detenido y de su poder se recuperó un automóvil
robado. El procedimiento tuvo lugar en la madrugada de este martes en el barrio
Mburucuya, de Asunción.

El coche
tenía una chapa que corresponde a otro vehículo. Luego se comprobó que fue
robado de la zona de Capiatá el pasado 5 de junio, informó la Policía.

Es un auto
Toyota, modelo Corolla, de color blanco, registrado a nombre del propietario
Ever Chamorro, quien denunció el hurto de su rodado.

Un joven fue
detenido este domingo en el predio del Hospital General de Luque por agredir a
su esposa y a su suegra. Las víctimas radicaron la denuncia en la División de
Atención a Víctimas de Violencia contra la mujer, niño y adolescente.

El detenido
fue identificado como Luis Guillermo Morínigo Cabera, de 28 años, quien fue privado
de su libertad y puesto a cargo de la Fiscalía local.

Resultaron víctimas Maura Raquel Cabrera (34) y Antonia Cabrera (64), esposa y suegra del violento hombre detenido por la Policía, todos domiciliados en las calles Melo de Portugal y La Amistad, de la compañía Caacupemí, Areguá.

Se tuvo
conocimiento del hecho a través del sistema 911, acudió personal al lugar donde
fueron informados que la víctimas se encontraban en el Hospital Regional de
Luque  y que el supuesto autor se dirigía
al nosocomio en busca de su señora, por lo que personal de la Comisaría 3ra
Central fue alertada , pudiendo lograr su aprehensión.

La denuncia
fue formulada en la División de Atención a Víctimas de Violencia contra la
mujer, niño y adolescente, que tiene al costado de la Comisaría 3ra de Luque.

El fiscal de
Eventos Deportivos, Miguel Vera, dispuso la libertad de todos los hinchas
demorados en la noche del viernes luego del partido entre Sportivo Luqueño y 3
de Febrero.

La detención
preventiva de al menos 20 personas (hombres y mujeres) por hechos de vandalismo
había sido ordenado por el fiscal Vera.

Los
aprehendidos pasaron la noche en la FOPE y en la mañana de este sábado fueron
traídos bajo fuerte custodia a declarar en la Fiscalía de Luque.

Más de 4
horas declararon y finalmente fueron puestos en libertad. El fiscal argumenta
el mal procedimiento de la Policía de local y de Eventos Deportivos y a “viva
voz” comunicó la libertad de los aficionados capturados tras los incidentes.

El
representante del Ministerio Público reprochó a los comisarios por el operativo
que solo permitió la aprehensión de los aficionados y no de los cabecillas de
las barras organizadas, cuyo líder Tote Cáceres, y sus cómplices se encuentran
prófugos.

EL fiscal
tampoco aclaró sí va a ordenar captura de los principales responsables.

Sicarios motorizados
interceptaron y asesinaron a balazos a una contadora que circulaba a bordo de
su camioneta en pleno centro de Pedro Juan Caballero. La mujer se desplazaba
sola y regresaba de un supermercado cuando fue atacada.

La víctima del atentado fue identificada por la Policía como Elizandra Aranda Maldonado. La víctima acusó ocho impactos de bala, confirmaron los peritos de Criminalística de la Policía Nacional.

El hecho se
registró sobre las calles Teniente Herreros y Perpetuo Socorro, pleno centro de
esta capital departamental de Amambay.

Según testigos, dos sicarios que circulaban en una motocicleta sorprendieron a la solitaria mujer a bordo de una camioneta Ssangyong, modelo Tivoli, con matrícula IBT 086, y le dispararon a sangre fría con una pistola automática.

Tras el
atentado, los dos sicarios huyeron sin dejar pistas. Los agentes de
Investigaciones manejan varias hipótesis con relación al crimen. Una de ellas podría
tratarse de un crimen por encargo.

Un piloto iraní y otro venezolano fueron detenidos este sábado en el Aeropuerto Silvio Pettirossi, de Luque. En principio se constató que entraron al país con documentos irregularidades. Luego allanaron el hangar donde está guardada la aeronave en la que arribaron hace unos días.

El piloto
iraní fue identificado como Nader Ali Sabbori, mientras que el venezolano es
José Sosa. Ambos quedaron detenidos tras un procedimiento en la principal
terminal aérea de Luque.

De acuerdo a
los informes, el piloto iraní tendría documentos y licencia para pilotar
falsos.

Por esa
razón, los organismos de seguridad procedieron a allanar el hangar donde está
estacionada la aeronave desde el pasado 5 de setiembre, informaron desde el
aeropuerto.

Los extranjeros
ingresaron al país en una aeronave LJ31, matrícula N31DP, proveniente de la
ciudad de Cochabamba, Bolivia, según la ruta de vuelo.

Este
procedimiento fue encabezado por el fiscal Hugo Volpe. El objetivo es verificar
el avión si trajo o debía llevar de Paraguay algún cargamento ilegal.

Al principio
se sospechó que la aeronave tendría un doble fondo para transportar cocaína.

El operativo fue hecho por agentes de la Senad, a raíz del aviso que se tuvo de los Estados Unidos, acerca del ingreso del sospechoso vuelo.

Se comprobó
en principio que el piloto iraní tiene una licencia que se le suspendió en el
año 2006.