Resultó
víctima Ediht González, de 36 años, quien sufrió el accidente al descender de
una camioneta. Los hierros produjeron raspaduras en la pierna derecha de la
mujer.

Luego
se dio aviso al Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Luque (CBVL).

Los
voluntarios acudieron al lugar en forma casi inmediata y tuvieron que utilizar
un expansor hidráulico para mover la estructura de hierro y liberar a la
ocasional víctima, explicó el capitán Carlos Vázquez.

El
suceso ocurrió en las calles Rosario y 7 de Octubre de la zona de Mora Cué
(camino Luque-Limpio), informaron los bomberos intervinientes.

La mujer fue liberada en unos 25 minutos. Luego se rehusó en ser trasladada en una ambulancia hasta el Hospital de Luque, alegando que su marido lo llevaría hasta el centro asistencial para los primeros auxilios de las raspaduras presentadas en una de las piernas.

Los vecinos del lugar denunciaron que varias personas sufrieron este tipo de accidente en el lugar.

Sin embargo, la Municipalidad hasta el momento no intervino pese la denuncia de los lugareños, solicitando que la estructura de hierro se remueva del lugar para evitar otro caso similar.

El suceso
ocurrió en Coronel Martínez y Cirilo Gill, de la compañía Maka’í, de Luque.

Los aprehendidos
son José Ariel Villasanti Sandoval, pyo, soltero, de 26 años, domiciliado en
calle Itá Cajón y La Amistad, Maka’í, Luque, y A. R. P. B., menor de 17 años, domicilio
en Makaí, Luque, según el informe policial.

BREVE RELATO

Se tuvo
conocimiento del hecho de inseguridad mediante vecinos del lugar, quienes visualizaron
a dos personas con las mismas características que realizaron un hecho de robo
agravado a dos personas.

Los
patrulleros localizaron a unos 300 metros del lugar a los sosepechosos, quienes
fueron reducidos por los vecinos. En el poder de los aprehendidos hallaron dos
aparatos celulares robados a sus víctimas y un arma blanca.

Los
sospechosos fueron trasladados hasta la comisaría jurisdiccional. Luego se
comunicó procedimiento al agente fiscal de turno y a la jueza de la niñez.

El procedimiento
estuvo a cargo de los agentes de Grupo Lince, suboficiales ayudantes Walter
Valdez y Luis Maqueda (Lince 32), y contó con el apoyo de la Patrullera C-37,
de la Comisaría 3ª de Luque.

El asalto a la aguatería “González
& Gamarra SRL”, fue perpetrado por dos delincuentes y ocurrió en la mañana
del sábado, alrededor de las 08:00.

Los desconocidos llegaron al lugar a
bordo de un automóvil Toyota Corolla, gris, y simulando ser clientes.

Luego tomaron de rehén a la responsable
del lugar, identificadas como Ida Julia González viuda de Gamara, de 77 años, a
quien exigieron con arma de fuego la entrega del dinero consistente en G. 21
millones, que estaba guardado en un maletín.

Una vez lo grado del objetivo, los
delincuentes escaparon del lugar a bordo del citado automóvil.

El hecho fue comunicado a la Comisaría
46ª Central. La jefa de la comisaría, Crio. Prin. Arsenia Caballero, acudió al
lugar para averiguar el hecho denunciado.

Luego se convocó a los agentes de
Investigaciones para seguir el caso. Además, se dio aviso a la Fiscalía.

Otro asalto, en Tarumandy

La Comisaría 29ª de Tarumandy, Luque,
también comunicó un hecho de asalto perpetrado dos motochorros. El caso,
ocurrido en la entrada a Nueva Asunción (Ruta Luque San Bernardino), fue
denunciado en la noche del viernes pasado.

Resultó víctima el contratista de obras
Librado Salvador Ortiz Cardozo, de 34 años, quien fue despojado de la suma de
15 millones de guaraníes.

Según dijo a la Policía jurisdiccional,
el dinero era para pagar a los albañiles.

En el momento del asalto, el constructor
se encontraba a bordo de su motocicleta y tenía como acompañante a Juan Arón
Balmori Vergada.

La víctima relató que el viernes,
alrededor de las 20:50, fueron interceptados por dos motochorros, quienes le
obligaron con arma de fue a entregar el dinero que tenía en una mochila, además
de su billetera, documentos y una botas de trabajo.

Manifestó que el dinero era para el
pago de sueldo a sus personales ya que se desempeña como contratista de obra.
El caso fue comunicado a la Policías.

Resultó víctima María Mercedes Giménez de Gill, docente, de 43 años, domiciliado en Cuarto Barrio, Luque.

La mujer relató en su denuncia que el vehículo dejó estacionado en las calles Bertoni y Héroes del Chaco, de donde fue «levantado» por los delincuentes en la mañana del martes pasado.

Agregó que al salir ya no encontró su vehículo. Luego radicó la denuncia en la Comisaría 3ra de Luque.

Últimamente, en Luque se reportaron varios casos de robos de vehículos en diferentes barrios y compañías.

Según los antecedentes, en la mañana
del 28 de noviembre del año 2018, el abogado Pablo Sanabria encabezó un
violento desalojo, atropellando la vivienda de la anciana con unas 40 personas
con maquinarias y policías resguardando el procedimiento ilegal.

Arrasaron todo a su paso, incluso
derrumbaron una vivienda antigua donde residía la indefensa mujer. Las imágenes
de video y fotografías muestran el difícil momento que sufrió la víctima, quien
se descompensó al no poder resistir el maltrato y la humillación a la que fue
sometida por el abogado que actuó con mucha prepotencia, ordenando al oficial
de Justicia José Núñez y a los propios policías de la Comisaría 3ª de Luque, en
ese entonces a cargo del comisario principal Víctor Vera.

Sanabria ordenó echar el alambrado y
tirar los enseres domésticos de la abuelita a la calle, pese a que la orden de
desahucio era contra Félix de Valois Franco, esposo de la anciana e indefensa
mujer. Es decir, la orden era contra otra persona y sacaron a la fuerza a la
mujer, pese a una medida cautelar que le permitía a Irma Rojas a ocupar el
terreno.

Tras hacerse pública la aparatosa intervención
contra la abuelita Irma Rojas, la ciudadanía luqueña se levantó contra injusticia
y se organizó un multitudinario escrache frente a la casa del abogado  Sanabria (sobrino
del juez Enrique Sanabria y representante legal de la Inmobiliaria EG del Sol),
que buscaba quedarse con la propiedad.

Los manifestantes repudiaron
enérgicamente la cobarde actuación contra la humilde abuelita de Zarate Isla.
Luego, el 18 de diciembre del mismo año se presentó la denuncia formal en la Fiscalía
de Luque. La causa recayó en la Unidad Penal N° 1 de la Fiscalía de Luque, a
cargo del fiscal Francisco Torres, quien finalmente imputó por los hechos
punibles de coacción y producción inmediata de documentos públicos de contenido
falso al abogado Pablo Sanabria Roa y al oficial de Justicia José Oscar Núñez
Morínigo.

Según argumentó el fiscal Torres en su
imputación contra los procesados, “ambos tenían conocimiento del juicio
existente y de la medida cautelar emanada por el juez de Primera Instancia en
lo Civil y Comercial del 4° Turno de Luque, Daniel Ocampos, por A.I. N° 187, de
fecha 24 de noviembre del año 2016, la cual incluso se halla inscripta en la
Dirección General de los Registros Públicos, de fecha 25 de noviembre del mismo
año; en donde a más de no ser la persona contra la que iba el desahucio
judicial, y pesar de en contra las medidas cautelares ya citadas, los mismos
violentaron todos los derechos constitucionales de la víctima (Irma Rojas)”,
denunciante del grave hecho.

El escrito agrega y sindica a los dos
procesados como “autores del hecho, procedieron entre otras cosas a ordenar a
los obreros a que quiten el alambrado, cambien el cerco perimetral y tiren al
suelo la construcción asentada en dicho lugar; quienes al ritmo de aplausos y
gritos del abogado Pablo Sanabria y el Oficial de Justicia José Núñez, tiraban
todos los que encontraban a su paso, incluso un gallinero, sin que la orden
judicial existente sirva de resguardo.

Por último, señala que “la intervención se realizó con presencia policial, sin orden o autorización judicial suficiente, mediante el uso de la fuerza pública, en un claro ejercicio abusivo de funciones constriñeron gravemente, compeliendo a salir de la vivienda contra su voluntad a la víctima y en contra a lo establecido en la orden de no innovar dictada por un juez compatente en relación a la finca N° 7564, que a pesar de ser exhibido por el señor Germán Espínola y el abogado Rodolfo Berensen a los policías intervinientes y al oficial de Justicia, éstos optaron por desconocer la misma e invadir el inmueble”.

El suceso ocurrió en la noche de este miércoles, alrededor de las 22:00, en las calles Santiago Villalba casi Digno García, del barrio Primavera, Luque, según informó el propietario del lavadero.

Según el comunicador, el portón del local fue violentado y luego aparentemente utilizaron combustibles para rociar el interior del lavado para finalmente prenderle fuego.

El comisario Feliciano Ferreira, subjefe de la Comisaría 3ra de Luque, informó que un grupo de agentes está investigando el hecho, primeramente a través de cámaras de circuitos cerrados para tratar de identificar a los autores del hecho.

«Tano» Barreto posteó que «quemaron todo su fuente de ingreso, mi pequeño lavadero».

Luego dijo a Luque Noticias que la pérdida económica sería aproximadamente de unos 15 millones de guaraníes.

El afectado explicó que en el incendio perdió totalmente todos sus equipos para el lavado de vehículos como moto bomba, aspiradoras, tanques de reservorios y una compresora.

«Tano» Barreto trabaja como periodista deportivo en la Radio local Azul y Oro y sus comentarios referentes al Club Sportivo Luqueño así contra los hinchas habrían propiciados la reacción de un sector de los seguidores del club, tal como especula a raíz de las amenazas que venía recibiendo en sus redes sociales y WhatsApp, respectivamente.