El procedimiento tuvo lugar en la mañana de este martes, siendo las 10:45, en la Oficina De Ayudantía – Comisaria 3ª  Central de Luque, sito en la calle Mariscal López casi Tte. Herrero Bueno, de esta ciudad.

Se trata  de María Luisa Jiménez Morilla, paraguaya, soltera, de 38 años de edad, peluquera, domiciliada en la calle Wenceslao Martínez Km 20 Yukyry, en Luque

La detención se hizo en cumplimiento al  Oficio Judicial N° 3106, de fecha 26/09/2024, causa N° 9449/2019, caratulada “MARIA LUISA GIMENEZ MORILLA S/ H.P. LA LEY 1340/88 Y SUS MODIFICACIONES” (microtráfico), emanado y firmado por la Jueza Especializada en Delitos Económicos e Interina del Juzgado de Ejecución Penal N° 1 de la Circunscripción de Central, Abg. MARIA LIDIA WYDER.

BREVE RELATO: En fecha y hora indicadas personal de la Comisaría Tercera Central, a cargo del Ofic. 1° RODOLFO AGÜERO, recibió en la oficina de Ayudantía a la ciudadana MARIA LUISA JIMENEZ MORILLA, quien se presentó a fin de ponerse   disposición de la Justicia y al consultar su número de cédula al Sistema Quantum de la Policía Nacional, resultó ser la misma con orden de captura pendiente y el cumplimiento de Pena Privativa de libertad de 5 años, que deberá cumplirlo en un Centro Penitenciario habilitado para el efecto, procediendo a su detención.

La mujer será trasladada hasta la cárcel del Buen Pastor, en Asunción.

La presunta microtraficante fue identificada como Nilsa Isabel Fernández, de 54 años, quien fue detenida por los intervinientes.

En la intervención encabezada por el fiscal Marco Amarilla, la cual tuvo por objeto la obtención de pruebas y la detención de la implicada, fueron incautados más de 500 gramos de marihuana, 60 gramos de chespi en diferentes tamaños y unos 56 gramos de cocaína. Un arma de fuego también formó parte del listado de evidencias.

En la investigación han identificado a otras personas ligadas a este negocio sobre las cuales ya pesan órdenes de aprehensión.

La detenida colaboraba con proveedores de barras que se valen del microtráfico como una vía de recaudación ilegal.

En dicho operativo se encontraba en el eje de denuncias una mujer de 33 años. Esta, fue detenida con dosis de la droga y otras evidencias.

Junto al fiscal Abg. Marco Amarilla observaron flujos de compradores de drogas en la vivienda de Gabriela Gaona, de 32 años, por lo que se determinó la intervención que levantó importantes elementos, entre ellos 37 dosis de crack. La mujer quedó detenida y a disposición del Ministerio Público.

Días atrás, en la misma ciudad, una intervención había capturado a un reincidente distribuidor respaldado por el Clan Rotela, de ahora en más, las indagaciones están puestas en esa línea, seguir con el rastreo de focos que en algún punto se conectan a ese esquema.

Del operativo emprendido en el barrio San Isidro, de la compañía Maramburé-Luque, la SENAD condujo el allanamiento a una vivienda para desmantelar un esquema de distribución de crac administrado por una mujer reincidente en el ilícito, quien contaba con la colaboración de un hombre de 30 años. Cercano al punto de distribución allanado se encuentra un centro educativo.

La principal sospechosa fue identificada como Emilia González Medina, de 65 años, más conocida en el ámbito de la distribución de drogas como «Ña Emi«, fue detenida en un operativo conjunto encabezado por el fiscal Abg. Marco Amarilla. La mujer que ya presentaba antecedentes por tráfico, ocultaba porciones grandes y dosis de la droga en un peluche.

Junto a «Ña Emi» fue detenido Claudio Adrián Cano, quien colaboraba en la distribución de la droga. En la vivienda intervenida también se encontraban varios consumidores de drogas.

En el momento del procedimiento fueron incautados unos 115 gramos de crac, equivalentes a casi 800 dosis de la cocaína fumable.

Una investigación encarada por la Dirección de Operaciones Urbanas culminó con su captura y la incautación de todas las evidencias.

Los antidrogas constataron que Mauricio Rafael Pereira, había retomado la actividad ilegal de venta de drogas a jóvenes de la zona, por lo que junto al fiscal Abg. Marco Amarilla articularon un procedimiento en la búsqueda por obtener evidencias.

La orden de allanamiento derivó en el incautación de 28 dosis de crack en poder del distribuidor.

Tras la detención y la incautación se dispuso la apertura de un seguimiento a fin ampliar los alcances de la investigación para llegar a más proveedores conectados al capturado.

La importancia del operativo radicó en que el lugar de distribución estaba ubicado en la cercanía de un centro educativo y espacios recreativos.

En primer lugar, los agentes fueron recabando datos sobre el modo en el que operaba el negocio familiar que era camuflado con una bodega.

Los encargados de que drogas sean distribuidas fueron identificados como Clemente Mereles, de 54 años, y su hijo Alex Mereles, de 27 años, según informó la Senad.

Con la irrupción al local comercial fue posible la incautación 67 dosis de cocaína y 139 gramos de marihuana. A su vez fueron requisados dinero en efectivo y balanzas de precisión.

La estratégica ubicación del lugar les brindaba algunas ventajas por la constante concurrencia de personas cercana a una cancha barrial mientras que también se constituía en altamente peligrosa por la proximidad a un centro educativo.

El procedimiento fue encabezado por el fiscal Abg. Elvio Aguilera.