El camino se encuentra lleno de baches de todas las medidas y hasta «cráteres», que los conductores principalmente de vehículos livianos deben hacer malavirismos para transitar por la zona y evitar accidentes.

Los frentistas juntaron firmas para exigir a la Municipalidad de Luque la limpieza de los canales laterales, bacheos de la arteria y arreglo de cañería de la Essap.

Precisamente, la pérdida de agua potable en plena avenida deriva en la aparición de numerosos baches.

Por esta arteria circulan camiones de gran porte y destruyen el camino vecinal.

Según el informe el cuadro estadísticos, San Lorenzo cuenta con 1.522 casos (73 nuevos, 731 activos, 791 recuperados, y 19 muertes).

Mientras Luque se ubica en segundo lugar con 1.066 casos en total: (50 nuevos, 525 activos, 541 recuperados, y 17 fallecidos).

En el tercer puesto se encuentra Lambaré con 1.057 casos en total: (47 nuevos, 564 activos, 493 recuperados y 13 fallecidos).

En el cuarto puesto se encuentra Capiatá con 875 casos: (37 nuevos, 421 activos, 454 recuperados y 13 muertos).

Entretanto, Fernando de la Mora, se mantiene en el quinto lugar con 869 casos confirmados: (37 nuevos, 436 activos, 433 recuperados y 12 muertos).

Cabe destacar que Limpio salió de la «zona roja». Cuenta con 526 casos notificados: (17 nuevos, 174 activos, 352 recuperados, y 9 fallecidos.

Luego aparecen Itaugua: (479 infectados y 10 fallecidos). Villa Elisa: (437 notificados y 10 fallecidos). Ñemby: (453 casos y 6 fallecidos). Mariano Roque Alonso: (417 infectados y 5 muertos). Areguá: (227 casos y 5 fallecidos).

La lista sigue con Itá: (165 casos y 4 muertos). San Antonio: (199 casos y 5 muertos). Villeta: (136 casos y 4 muertos). Ypané: (142 casos y 2 muertos). J. Augusto Salvívar: (109 casos y 2 fallecidos). Ypacaraí: (96 infectados y 3 fallecidos). Guarambaré: (85 casos y 1 muerto).

Nueva Italia es la ciudad de Central que cuenta con menos infectados. Solo cuenta con 18 casos confirmados y un fallecido.

Total de casos en Central: 8.898. Total de fallecidos: 140. El informe fue remitido (fuente) por la Undécima Región Sanitaria, dependiente del Ministerio de Salud Pública.

En
el caso de la ANDE, la exoneración del pago de facturas incluye a todos los
usuarios cuyo consumo sea menor a 500 kW, es decir, unos G. 221.000. En el caso
de la Essap, el consumo exonerado es hasta G. 50.000.

El
consumo exonerado abarcaba hasta el mes de julio, que se factura en agosto. Con
el decreto se incluye el consumo de agosto, a facturarse en setiembre, según
informaron desde el Poder Ejecutivo.

Lavigne también se refirió a un inconveniente que tuvieron en su empresa (Concasa, ubicada en Luque), con un cliente para la provisión del cemento, justamente a raíz de la acuciante escasez del producto.

En ese sentido, explicó que se pudo llegar a un acuerdo con el cliente, pese a que la empresa tuvo que comprar el cemento a un precio mucho más alto, pues consiguieron el producto en Pedro Juan Caballero y Ciudad del Este para abastecer los pedidos.

El titular de la Cadimaco se mostró preocupado por la acuciante falta de cemento, que incluso, podría extenderse hasta fin de año. Los precios también se disparan.

“Vamos
a tener que seguir abasteciéndonos con la importación y porque tanto la
cementera Yguazú como la INC no podrán satisfacer nuestra demanda actual. Esto
nos afecta de manera directa y perjudica, principalmente la mano obra porque si
no tenemos cemento, no vendemos los otros materiales de construcción”,
puntualizó el empresario.

“Ahora
se consigue cemento mucho más caro por los sobrecostos del flete y las dos
fábricas locales van a seguir con problemas en su producción, debido a que no
pueden transportar el volumen de clínker para producir por la bajante del río
debido a la sequía. Esto dificulta que les llegue la cantidad requerida, puesto
que la demanda está en alza en el mercado local”, señaló Lavigne.

El
titular del gremio de las casas de materiales de construcción también explicó
que el pasado 14 de agosto, la cementera privada (Yguazú), comunicó acerca de
una avería en su planta de producción, complicando aún más la producción y
entrega del cemento.

Sin
embargo, indicó que ya recibió la información de que la fábrica está nuevamente
operando y produciendo con normalidad en su sede de Villa Hayes.

La jueza de Faltas, Edith Escobar, encabezó el procedimiento este viernes en el microcentro de Luque.

Aparentemente el operativo se filtró y los vendedores informales no sacaron sus productos para vender en las calzadas.

La idea de la comitiva era incautar las mercaderías de contrabando ofertadas en plena calle.

Cabe señalar que la Municipalidad de Luque realiza periódicamente el despeje de calles para desalentar la presencia de vendedores en la vía pública.

Sin embargo, los trabajadores informales enseguida retornan a sus respectivos «puestos», apropiándose de los espacios públicos.

El responsable de la Oficina de la Essap en Luque, José González, explicó que se realizó un arduo trabajo para solucionar la pérdida de agua en plena avenida.

La pérdida de agua potable se generaba en la avenida Humaitá y Capitán Bado. El derrame constante producido desencadenaba una «inundación» en el Mercado N° 1 de Luque.

La presencia de agua en las calles y el paso de vehículos también desencadenó en la proliferación de baches en las calles adyacentes al Mercado.