Municipio instaló vallado luego de la tragedia
VER VIDEO | Por fin la Municipalidad de Luque mandó instalar el vallado de seguridad de hierro y metal sobre el puente de las calles Mariscal López y Curupayty, en dónde fueron arrastradas y murieron en el arroyo San Juan, la señora Sara Benítez y su hija Nilda Barrios.
Luego del fatal raudal, el fiscal Jorge Escobar, imputó al intendente de Luque Carlos Echeverría (ANR), y al agente de Lince Brahian Gómez, conductor del vehículo arrastrado por el raudal.
El metalúrgico Juan Darío Cáceres fue contratado para la construcción de la baranda de seguridad y así evitar más tragedias en la zona, detrás del Club Balderrama.
El Arq. Adrián González, director de Obras de la Municipalidad de Luque, estuvo verificando los trabajos de instalación y pintura del vallado.
La Municipalidad también instaló cartel de señalización para alertar a los conductores y peatones sobre el peligro del raudal en época de lluvias.
Según los antecedentes, el raudal que arrastró y mató a madre e hija sucedió el pasado 24 de abril en el puente de las calles Mariscal López y Curupayty, centro de Luque.
El fiscal Jorge Escobar colectó las pruebas, allanó la Municipalidad de Luque, y luego imputó al intendente Echeverría, por los hechos punibles de intervenciones peligrosas en el tránsito terrestre y homicidio culposo.
Además, el fiscal imputó al policía por exposición al peligro en el tránsito terrestre y homicidio culposo por carecer de licencia de conducir.