“Automisa” en Luque: Clase política corrupta sigue vigente, alertó arzobispo
El
objetivo principal de la ceremonia denominada “Fiesta al Señor” fue la de
elevar una oración por el fin del coronavirus, que afecta actualmente al mundo
entero, y en Paraguay ya registró 15
muertos y casi 2 mil infectados, generando una gran preocupación.
“Esta
iniciativa litúrgica nos permite celebrar la santa misa al aire libre, sin
aglomeración, en clima de fiesta, a pesar del frío y de la hora. Vinimos para
rezar a Dios pidiendo por el fin de la pandemia y por un nuevo futuro de
nuestro país con reformas serias y justas para el bien el pueblo”, expresó el arzobispo Valenzuela.
El
religioso también hizo mención al caso de la niña madre de 11 años que fue
intervenida el viernes en el Hospital Nacional de Itauguá. La menor de edad
quedó embaraza como consecuencia de un abuso sexual par parte de un menor de
edad que ya fue imputado por la Fiscalía de Pedro Juan Caballero.
“Nos
urge a todos la protección y prevención de abusos de menores como tarea de toda
la sociedad, Iglesia y Estado”, agregó.
IMPERANTE
CORRUPCIÓN
Valenzuela
señaló en forma tajante “que en este
tiempo de pandemia, mientras la gente se quedaba en casa, muchas autoridades se
aprovecharon de la inocencia de las mismas con el mal manejo de las cosas
públicas”.
El
religioso sostuvo “que sigue vigente la
clase política corrupta, de la cual la sociedad está harta, pues todos siguen impunes”,
denunció.
“Sí
al menos algunos de ellos manifestaran signos de conversión, tal como sucedió
Zaqueo ante Jesús; devolverían lo robado y el Estado recuperaría millones de
dólares sustraídos impunemente, que podrían ser destinados a salud, educación,
viviendas, y a favorecer a la clase trabajadora. Nos urge la reforma moral del
Estado”, sentenció durante su dura homilía.
Cabe
señalar que la misa también se ofició para quienes no lograron participar aún
de ninguna en los últimos meses, ya que se ve afectada la participación de
numerosos fieles por el límite de personas permitidas, según el protocolo que
establece el Gobierno Nacional para las ceremonias religiosas, en la fase 3 de
la cuarentena inteligente que está vigente.