Luqueños homenajearán a monseñor Zacarías por sus 50 años de sacerdocio
El monseñor Zacarías Martínez cuando se desempeñaba como cura rector del Santuario de Luque.
Los luqueños organizan un gran festival para homenajear este viernes al monseñor Zacarías Martínez por sus 50 años de ordenación sacerdotal. Martínez se desempeñó como cura rector del Santuario Nuestra Señora Virgen del Rosario durante 13 años, y es muy querido en Luque.
Actualmente, el padre cumple funciones al frente de la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, de Mariano Roque Alonso. Precisamente en esa parroquia le hicieron un reconocimiento el domingo pasado.
Rocío Lezcano, del Santuario Virgen del Rosario, informó acerca de las actividades previstas para el viernes.
Lezcano invitó a los fieles a participar de la misa central en honor al monseñor Martínez, prevista para las 19:00, del viernes. Seguidamente se realizará un festival folclórico para reconocimiento al ex cura rector de la Virgen del Rosario con la participación de varios artistas locales.
Biografía del monseñor Martínez
El monseñor Zacarías Martínez nació en Atyrá (Codillera), el 5 de noviembre de 1942. Hijo de Bienvenido Martínez y Toribia Martínez. Realizó sus estudios en Atyrá y la escuela de Hogar de Niños y Ancianos del Asilo Nacional. El bachillerato lo hizo en Filosofía y Teología en el Seminario Metropolitano.
Fue ordenado el 27 de octubre de 1968 en el Seminario Metropolitano. Cargos: Vicario Cooperador de la Recoleta, 1968. Párroco de la Parroquia Nuestra Señora de Fátima de barrio Jara, en el año 1969. Vicario Cooperador de la Parroquia de Luque, noviembre de 1969 a febrero de 1975. Miembro del equipo Directivo del Seminario Mayor y Vicario Cooperador de la parroquia de Lambaré de marzo de 1975 a enero de 1978.
Otros cargos
Miembro del Equipo Nacional de Liturgia (música sacra), socio fundador del Círculo Paraguayo de Artes Mágicas (CIPARMA). Fue Cura Párroco de la Parroquia Virgen de la Medalla Milagrosa, de Fernando de la Mora, desde el 29 de enero de 1978, durante 17 años.
Dirigió la Escuela y Colegio parroquial Medalla Milagrosa. Fue secretario Ejecutivo del equipo Nacional de Presbíteros de la Conferencia Episcopal Paraguaya y vicepresidente de la ASIEC Nacional (Asociación de Instituciones Educativas Católicas).
También fue coordinador del Departamento Arquidiocesano de Diaconado Permanente. Delegado diocesano ante el equipo Nacional de Presbíteros. Miembro del Consejo Presbiteral de la Arquidiócesis y miembro del Colegio de Consultores de la Arquidiócesis.
Además ocupó el cargo de coordinador de la ESAMPA (Escuela de Animación Misionera del Paraguay) de la OMP (Obras Misionales Pontificias). Iniciador de VICAJEMA (Virginidad y castidad con Jesús y María). Vicario Episcopal Territorial Zona Norte de la Arquidiócesis de Asunción. Además, fue nombrado ciudadano dilecto de Fernando de la Mora, Luque y Mariano Roque Alonso.
Quería ser mecánico
La feligresía luqueña siempre acompañó al padre Martínez. Aquí con los fieles durante la fiesta patronal.
El inquieto adolescente Zacarías Martínez quería estudiar mecánica en la Digetren (Dirección General del Servicio de Tren) de las Fuerzas Armadas, del barrio Recoleta, de Asunción.
En aquella época formaba parte de un grupo de niños y adolescentes que concurrían al Hogar de Niños del Asilo Nacional, donde su padre era jardinero.
En esta institución a cargo de las hermanas Vicentinas, también funcionaba una escuela para los niños internos. Entre ellos se encontraba Zacarías Martínez que durante el día iba al Hogar y por las noches volvía a casa con su familia.
“Como éramos muy pobres, pensé estudiar mecánica en la Digetren por tres razones: seguir el básico, hacer el servicio militar, y salir con un oficio”. En ese proyecto se hallaba, porque terminaba la Primaria, cuando un día la Hermana Isabel Arce, encargada del pabellón de Niños del Asilo le plantea:
¿Quieres ir al Seminario?
A lo que Zacarías Martínez sin titubear le respondió que sí. “Recuerdo que luego fui a la chacra que había ahí, y bajo un planta de limonero lloré muchísimo. Tenía un gozo en el corazón. No fue un llanto de amargura, sino de felicidad”, recordó emocionado.
Él había venido con sus padres y hermanas de Atyrá a Asunción. “Mi papá era ñembo´e´ýva (guía en los rezos). Recorría las compañías para rezar el Novenario a los difuntos y a los santos patronos. Procedo de una familia donde el papá era de mucha oración”, explicó.
Para que pudiera ir al Seminario, sus progenitores recurrieron al Padre Juan Bautista Queiróz, párroco de la Recoleta, en cuya jurisdicción residían.
“Mi familia era pobre”. Entonces la parroquia de la Recoleta se encargó de solventar sus estudios. En 1957 ingresó al Seminario Metropolitano donde conoció a sus demás compañeros. Allí desarrolló su formación de doce años.
El padre Zacarías Martínez es “Ciudadano Ilustre” de Luque, por resolución de la Municipalidad local. Desde el 2003 y por 13 años estuvo como Cura Rector del santuario Nuestra Señora del Rosario de esta ciudad. Su actitud sacerdotal es “estar siempre disponible” como un verdadero servidor de Dios.
Fuente: Departamento de Comunicación del Arzobispado de Asunción.
