Hinchas declaran en Fiscalía y familiares cuestionan procedimiento policial

La Comisaría
3ra de Luque comunicó la detención preventiva de al menos 20 personas (hombres
y mujeres) por hechos de vandalismo tras el partido entre el Sportivo Luqueño y
el 3 de Febrero, que terminó empatado 1-1, en el estadio General Díaz, donde el
Auriazul actuó de local.

El operativo
policial fue duramente cuestionado por los familiares de los demorados,
teniendo en cuenta que la mayoría de los que fueron privados de su libertad en
la noche de este viernes no son integrantes de la barrabrava “Chancholigan’s”,
liderada por Tote Cácares, quien se encuentra prófugo, precisó el comisario
Víctor Vera.

Los hinchas
organizados al término del partido, procedieron derribar el vallado perimetral,
ingresando a la cancha e intentaron atacar el vestuario ocupado por los
futbolistas luqueños, pero fueron repelidos por los agentes antidisturbios.

El
enfrentamiento entre los violentos hinchas y policías produjo una estampida de
los demás aficionados que querían protegerse del encontronazo.

Luego los
barrabravas salieron hacia la ruta General Aquino, donde protagonizaron hechos
de vandalismo. Los daños materiales fueron cuantiosos a la propiedad de
terceros, a las patrulleras, ómnibus que trasladaban a los jugadores, vehículos
de terceros y lesión a personal policial, tras finalizar el encuentro de fútbol
entre los clubes Sportivo Luqueño y el Club 3 de Febrero en el estadio Adrian
Jara, reveló el informe policial.

A la Fiscalía

Los hinchas
organizados y aficionados de Luqueño fueron traídos de Asunción a la Fiscalía
de Luque para prestar declaración indagatoria sobre los disturbios.

Los
familiares de los aprehendidos cuestionaron el procedimiento policial, alegando
que los agentes demoraron a los aficionados que nada tenían que ver con hechos
de vandalismo.

Sin embargo,
los principales líderes de los barrabravas están prófugos, empezando por el
propio Tote Cáceres y sus cómplices.

Al final la mayoría de los demorados fueron aficionados que intentaron refugiarse en una estación de servicios de la avenida Gral. Aquino y Sudamericana. Los menores de edad fueron entregados a sus padres, informó el subcomisario Marcelino Brítez, subjefe de la Comisaría de Luque.

Brítez mencionó que en principio fueron atrapados más de 50 aficionados, pero los menores de edad fueron entregados a sus familiares.

El fiscal de
Eventos Deportivos Miguel Vera y su asistente Ricardo Arce, quienes deberán
decidir el cargo contra cada uno de los aprehendidos y serán imputados o no en
las próximas horas.

Sandra
Bogarín denunció que su esposo Hugo Insfrán (funcionario de la Municipalidad de
Luque), también está entre los detenidos. La mujer encaró al comisario
Inocencio Machado sobre el procedimiento irregular.

Cecilia González también cuestionó la labor
policial, alegando que su hijo y su sobrino fueron privados de su libertad,
pese a que no forman parte de los barrabravas luqueños, y tampoco participaron
de los disturbios.